Crítica: Faith No More - Sol Invictus

18 añazos han tenido que pasar entre disco y disco de Faith No More, el servidor que aquí os escribe aún no levantaba dos palmos del suelo cuando los de Patton presentaban el 'Album of The Year'. Por tanto, soy de los 'fans' de Faith No More que los pillaron años despúes del patadón que le dieron a la escena musical noventera con sus discos totalmente distintos a cualquier cosa que se pudiera escuchar en aquellos tiempos y que fue involuntariamente pionero de mil cosas, como por ejemplo el 'nu metal'.

La banda californiana estaba separada y salvo algunas reuniones para girar no parecía que fuera a poder experimentar la sensación de esperar un nuevo disco de los FNM hasta que el año pasado dieron el notición. A unos nos ilusionó, a otros los acojonó "¿Un nuevo disco de Faith No More en pleno 2015? ¿Y qué cojones quieren demostrarnos estos señores a estas alturas?" Pues bien, ha llegado el día en que Sol Invictus se encuentra en nuestras manos (no físicamente ya que se ha filtrado como un mes antes de que salga) y las sensación previa a la escucha es de incertidumbre, incertidumbre sobre si te vas a encontrar un pelotazo del nivelón de Angel Dust o si tras tantos años han perdido esa magia y han sacado un truño infumable, incertidumbre porque nunca sabes qué te vas a encontrar en un disco de estos tipos, incertidumbre al fin y al cabo, y eso me pone colegas.

La portada es un tanto bizarra (en el sentido inglés de la palabra), con un chaval medio en pelotas y la cara tapada... curiosa y tal pero no creo que sea la portada del año precisamente. Pero ya dicen que no hay que juzgar un libro por la portada, no? Pues con los putos discos igual. Y ahora vamos a lo que importa.

La cosa abre con Sol Invictus, una elegante y sobria introducción que deja paso al single Superhero, el tema más directo del redondo, cañero y que dejó buen sabor de boca como adelanto. Sunny Side Up nos recuerda ligerísimamente al clásico Evidence mezclado con breves toques del sonido de Angel Dust. Temas como Separation Anxiety, Cone of ShameRise of the Fall mantienen un ritmo frenético y un notable nivel. Por desgracia, la cosa baja al pasar la mitad, Black Friday y el adelanto Motherfucker nos dejan algo fríos tras el nivel mostrado en otros temas (aunque no logro quitarme el "get the motherfucker on the phone... the phone..." de la cabeza, jodidos Faith, hasta sus temas flojos se pegan, macho...) Matador arranca tenebrosa, con el piano de Roddy acompañando el oscuro combo de Hudson y Gould para ir creciendo hasta arrollar con esa magia faithnomoriana y convertirse en el tema favorito del disco para un servidor. Obvia decir que Patton lo peta en ese tema, más que nada porque lo hace en todo el disco y me repetiría como un jodido yogur de ajo... From The Dead cierra el disco de la misma foma que lo arrancó el tema título, con suavidad y sin grandes estridencias, cerrando 40 magníficos minutos que significan un digno regreso a la actividad discográfica por parte de los Californianos Faith No More.

En lo general, el sonido del disco tiene un tufillo al Angel Dust, con un sonido desquiciado y loco aunque algo privado de temas catalogables como "singles". También llama la atención el hecho de que es algo menos guitarrero que otros trabajos suyos, centrando la atención en las atmósferas creadas por el piano de Roddy Bottum y la siempre espectacular voz de Mike Patton que, como siempre, está con la polla totalmente fuera. Para rematar podemos decir que Sol Invictus es un buen regreso de Faith No More, no está al nivel de sus clásicos, eso es evidente, pero es un disco muy digno que suena 100% a la banda californiana. Al carecer de temas directos que entren a la primera, requiere de escuchas y paciencia para digerirlo pero acaba ofreciendo un muy buen rato al que lo escuche y cumple con las expectativas de cualquier fan de la banda. (7/10)


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